SOLTEC nace allá por 1989. Su fundador, que en ese momento trabajaba en una empresa de matricería, ve la necesidad de formular una crema limpiamanos para los operarios de la empresa en cuestión. Impulsado luego por un proveedor industrial, comienza la venta a terceros, dando inicio a nuestra empresa, que mantiene desde aquel entonces la misma filosofía: Ponernos en el lugar del usuario.

En 1996 la empresa se traslada a Mendoza y comienza un proceso de integración, adquiriendo una máquina de soplado para la fabricación de los envases. Años más tarde se suma además la producción de tapas por inyección.  En el 2005 emprende un proceso de reformulación de la crema limpiamanos para transformarla en un producto más seguro para el usuario y el medio ambiente. La misma política aplicó luego a toda la línea.

Hoy, nuestros 30 años de experiencia nos permiten contar con productos de excelencia 100% biodegradables y confiables, pensados para resolver la variedad de problemas de ensuciamiento de la industria y el taller automotriz. La suma de nuestras integraciones y transformaciones nos permiten llegar al mercado con productos totalmente diferenciados y a valores competitivos.

Guiados por nuestra misión, trabajamos codo a codo con nuestros distribuidores y nuestra red de vendedores a lo largo de todo el país, con quienes establecemos sólidas relaciones de largo plazo basadas en la confianza y en la calidad de nuestros productos.